lunes, 5 de abril de 2010

Impotencia


Corazón roto, palabras ahogadas. Turbios momentos bajo esta marejada

El gozo en un pozo, miradas veladas. Si pudiera romper tu tormento, alejar tu herida de la mar salada…

Necesidad de espacio, de tiempo para poderte curar… daría cualquier cosa para que tu felicidad pudiera perdurar.

El golpe de un infeliz te ha robado tu sonrisa, lamentando no poder sentir el dulce soplo de tu brisa… de tu presencia

Ahora necesitas descanso, poder escapar… prefiero que vueles libre para recuperar el brillo de tu mirada, para recuperar tu paciencia

Mentiría si dijera que no duele pero voto a bríos que verte así me conmueve, necesitas silencio, necesitas soledad

Necesitas tantas cosas que ojala te pudiera llegar a dar… mas sintiéndome impotente no sabría qué diablos haré para que tu felicidad puedas recuperar

Necesitas silencio, necesitas libertad… mi pobre corazón oxidado llora por saber que lo estas pasando realmente mal.

Impotencia, tristeza, dolor… la furia invade mi pecho y ardo en deseos por clamar venganza por ese daño, por esa ultranza

Por ese dolor al que te han sometido… partiría el mundo en dos hasta haber cumplido mi cometido…

Hasta haber cumplido cualquier tarea que pudiera devolverte la sonrisa, volcándome al completo en cumplir esto lentamente o a toda prisa…

Hasta remover esa tristura y amargueza de tu gran corazón y cautivadora cabeza

Hasta devolverte la felicidad que tanto mereces, mi deidad

Agotando mi último aliento para poderte rezar

Diciéndote cuanto lo siento por si te he podido fallar

Mostrando a ese idiota que merece su cuerpo empalar

Retorciendo su cuerpo hasta poder verle suplicar

Y arrancar de sus labios un jodido grito de dolor, algunos no merecen salvación

Decirle “te lo advertí” para acto seguido arrancarle su negro corazón

Ofreciéndotelo en bandeja por si eso pudiera apaciguar todo tu dolor

Devolver a tu semblante la felicidad, placer mayor que cualquier droga que el mundo me pueda colmar

Sentir tu mirada observándome para hacerme estremecer de júbilo

Tu voz diciéndome “léeme uno de tus poemas” con gusto

Y poder saber que lo que te ha pasado no fue nada más que un mal pasajero, un susto

Acurrucarme a tu lado para abrazarme a tu busto…

Robar de tus labios un beso más dulce que cualquier fruto

Sentir tu piel junto a mi piel y pensar tras esa vida haber podido arrebatar

Que lo que hice fue bien justo

Que mi impotencia fue solo una mala fortuna de este destino tan duro

Que tu presencia es el mejor de los regalos augustos

No hay comentarios:

Publicar un comentario