martes, 22 de junio de 2010

el horror

Cómo describir todo lo que me haces sentir.


Copa número uno de absenta. Así al pensar en tu rostro no sentiré dolor

Tengo miedo de abrir mi corazón, nadie me advirtió lo doloroso que es vivir

Nadie me había contado que el hecho de tener sentimientos me dejase tan tocado

Una dolorosa puñalada que roba la razón una princesa con cara de hada

Un profundo horror… que ahora noche tras noche olvido con alcohol.


Copa número dos de absenta. Si sentir todo esto representa

Sería mejor que volviese a mi caparazón, erigir una enorme muralla

Y sé lo que me contaras con tu voz. Que soy un cobarde, un canalla

Que mis promesas no valen nada… pero estoy seguro que tampoco imaginas cómo esto me pesa

Que su rostro no abandona mi cabeza, tu… ni el horror de que tus labios no volveré a besar


Copa número tres de absenta. Experimento en mis carnes las palabras de Wilde

Observan mis ojos el horror de este pesar. viendo las cosas tal y como son… la verdad

Que lo pasado, pasado está y no se podrá recuperar. Es este el precio de haber tenido que amar?

Si lo hubiera sabido antes no lo hubiera experimentado jamás. De nuevo, llámame cobarde

Pero es que mi pecho arde, no es la bebida… es un sentimiento, una acometida

Un punzante arrepentimiento… es esto entonces de veras la vida?

Maldigo entonces a los dioses… por entregarme este dolor


Copa número cuatro de absenta? De verás he sido capaz de tomarme todo este licor?

Nunca había sido capaz de beber tanto alcohol… quizá es una panacea que endulza mi rencor

Deseando entregarme en los brazos del hermano de Morfeo, entregando mi alma cual trofeo

Entregando mi cordura, entregando únicamente a la muerte toda mi pasión

Ya que cuentan que a su amante no rechaza tal y como lo hizo en el pasado vos

Llámame imbécil, llámame idiota, diga lo que me diga no arreglara mi alma rota

Llámame señor del averno, llámame vampiro… pues esos apodos arrancan un doloroso suspiro

Llámame gran persona, llámame amigo… haga lo que haga siento que vacilo

Siento que ya nada merece la pena, que el amor es en realidad algo que me envenena

Y sobre todo… siento de corazón… siento haberte conocido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario